La Educación Ambiental es Vital
Compartimos este artículo que nos envió el profesor Hernán Papaterra, agradeciendo su constante apoyo a la causa de la Educación Ambiental. Así mismo rendimos homenaje a su trayectoria ambientalista, su empeño por la arborización de las ciudades, su noble espíritu a favor de un planeta más vital.
Le haremos llegar este sencillo reconocimiento, hubiéramos querido entregárselo en sus manos en un evento pero la pandemia nos obliga a hacerlo de manera virtual, con igual sentimiento de admiración y gratitud.
Gracias profesor Papaterra.
Hoy tomamos conciencia del significado del Día Mundial de la Educación Ambiental que nacional e internacionalmente se celebra en todo el mundo cada 26 de enero.
Por el Profesor Hernán Jesús Papaterra, enero 2021
Esta importante efeméride dedicada al medio ambiente y su problemática tiene su origen en el año 1975 una vez celebrado en la ciudad de Belgrado (hoy capital de Serbia) el “Seminario Internacional de Educación Ambiental”.
Como resultado de ese Encuentro mundial se elaboró y publicó la conocida “Carta de Belgrado”. En ella se establecieron los llamados Principios de la Educación Ambiental en el marco de los diferentes programas de las Naciones Unidas.
La Unesco ya indicó en 1975 en la Conferencia de Belgrado que «La meta de la Educación ambiental era formar una población consciente y preocupada por el medio y por los problemas relativos a él; una población que tenga los conocimientos, las competencias, la predisposición, la motivación y el sentido de compromiso que le permita trabajar individual y colectivamente en la resolución de los problemas actuales y en que no se vuelvan a plantear«.
Todo ello implica el fomento de la formación, la participación y la toma de conciencia sobre las cuestiones ambientales, el cambio de valores y actitudes, la práctica en la toma de decisiones y la promoción de comportamientos proambientales.
Las razones de la Educación Ambiental son explícitas y debemos asumirlas con entera responsabilidad.
Ellas son:
- Proporcionar nuevos saberes y conocimientos sobre el medio ambiente y la naturaleza, bases del desarrollo humano sostenible en el planeta.
- Fomentar el Espíritu Crítico y la capacidad de evaluación responsable de los problemas ambientales.
- Promover la Participación Directa y Comunitaria en la solución de los problemas ambientales y sus consecuencias en la vida humana y de los ecosistemas y biodiversidad.
La enseñanza en materia de medio ambiente tiene el objetivo de implicar a los ciudadanos en la resolución de la crisis ambiental y social que padecemos.
La problemática ambiental tiene un importante componente social que condiciona el estilo de vida y el desarrollo de todos los habitantes del planeta.
Todo ello implica el fomento de la formación, la participación y la toma de conciencia sobre las cuestiones ambientales, el cambio de valores y actitudes, la práctica en la toma de decisiones y la promoción de comportamientos proambientales.
Adquirir los conocimientos, los valores y las habilidades prácticas para participar eficaz y responsablemente en la prevención y solución de los problemas ambientales y en la gestión de la calidad del medio ambiente.
Los objetivos de la educación ambiental pueden centrarse en los siguientes:
– CONCIENCIACIÓN: Ayudar a que la población adquiera mayor sensibilidad y conciencia del medio ambiente en general y de los problemas conexos.
– CONOCIMIENTO: Fomentar la comprensión básica del medio ambiente en su totalidad, de los problemas asociados y de la presencia y función de la humanidad en él mediante una responsabilidad crítica.
– ACTITUDES: Adquirir valores sociales e interés en el medio ambiente para crear impulsos activos en su protección y mejoramiento.
– APTITUDES: Ayudar a la población a adquirir las habilidades y destrezas necesarias para resolver los problemas ambientales.
– CAPACIDAD DE EVALUACIÓN: Evaluar las medidas y los programas de educación ambiental en función de los factores ecológicos, políticos, económicos, sociales, estéticos y educacionales.
– PARTICIPACIÓN: Fomentar que la población desarrolle su sentido de responsabilidad y que tome consciencia de la urgente necesidad de prestar atención a los problemas del medio ambiente, para asegurar que se adopten medidas adecuadas al respecto. Promover la participación e implicación.
La generación de grandes cantidades de residuos y su crecimiento continuo es uno de los aspectos más conflictivos del país.
¿Por qué debemos celebrar el Día Mundial de la Educación Ambiental?
Es necesario despertar y movilizar la conciencia responsable de la población, de los ciudadanos, y sus entidades políticas, económicas y sociales, para prevenir, reducir, enmendar y superar la diversidad de problemas ambientales que afectan a nuestro planeta y deterioran y destruyen sus recursos naturales y socioculturales.
Urge definir los conocimientos, las habilidades y las competencias para adoptar un comportamiento pertinente, seguro y sostenible con relación a nuestro medio ambiente, donde no seamos provocadores o causantes de riesgos y daños ambientales que comprometen la existencia de la vida humana, de los ecosistemas y la biodiversidad.
La circunstancia de la pandemia por el corona virus Covid-19 nos obliga a reestructurar y transformar la educación, información y comunicación ambiental que hemos tenido, enseñado y aprendido hasta finales del año 2020, con vista a los próximos diez años y el año 2030. Hemos descubierto que carecemos, que adolecemos de capacidad de resiliencia ante la contaminación y la degradación ambiental.
Es indispensable definir y conceptualizar cómo será la educación ambiental en los próximos diez años y en el marco de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible y la Agenda Mundial 2030. Este cambio debe ocurrir tanto en el mundo educativo y comunicacional como en el universo de la producción y consumo de bienes y servicios.
Sobre el profesor Hernán Papaterra
El profesor Hernán Papaterra, es egresado del Pedagógico de Caracas, en Matemáticas y Física, con Postgrado en Tecnologías de la Educación y Planificación de la Universidad de Salamanca. España. Planificador educacional, social y ambiental.
Viene apoyando desde hace muchos años el tema de la Educación Ambiental, especialmente promoviendo la importancia de la arborización de Caracas y otras ciudades de Venezuela.
Trabajó activamente con el Hermano Jesús Hoyos en la Fundación La Salle de Ciencias Naturales, como responsable de proyectos educativos y ambientales, junto a otras personalidades ambientalistas que aportaron y siguen aportando mucho a nuestro país. Exvicepresidente de la Sociedad Amigos del Arbol -Sadarbol.
Es un colaborador permanente y asesor de varias organizaciones, entre ellas Planeta Vital, donde desarrolla una labor ambientalista encomiable.
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